Birgit nació en un pueblecito del sur de Suecia en 1924, de padre médico y madre ama de casa. Ella y sus hijos poseen una fortuna de 14.000 millones de dólares, después de convertirse en propietarios de la compañía de envasado tras la muerte del marido de Birgit, la octava fortuna más importante de Suiza comenzó a amasarse en Suecia entre bolsas de harina y tetraedros de cartón. Hoy es el emporio Tetra Laval.
Radicados en Vaud por sus beneficios fiscales, Birgit y sus tres hijos dejan que los negocios se multipliquen sin olvidar los consejos del viejo Ruben.
Birgit Rausing no buscó al dinero, el dinero la eligió a ella, sin pedirlo, ingresó a la Lista de Forbes a los 75 años de edad; aunque lo suyo, insiste siempre, es la filantropía. A continuación la octava entrega de la serie "Fortunas Suizas".
Vivió una vida estable, realizó estudios equivalentes al bachillerato, y ya entrada en la veintena conoció, durante un viaje a Estocolmo, al que habría de ser el hombre con el que compartiría 45 años de vida: Gad Rausing, ella no sabía quien era. ni le interesaba, pero el destino le había escrito ya algunas páginas por adelantado.
El abuelo Ruben es el personaje más importante de la familia Rausing. Sin él, ni sus hijos, Hans y Gad, ni la familia conformada por este último con Birgit y sus tres hijos, habrían heredado todo lo que tienen.
Ruben solía decir: "Hacer algo que nunca nadie haya hecho es cada vez más difícil".
Él lo logró y aprovechó al máximo dicho talento. Nació en Raus, cerca de Helsingborg, Suecia. Estudió economía en Estocolmo, y en 1920 se doctoró en Ciencias en Columbia, Nueva York.
Viajar y vivir en los Estados Unidos cambió el rumbo de su vida. Allá, se encontró con el concepto de las tiendas de autoservicio, una estructura de comercio que no existía aún en Europa, pero en la que vio toda la proyección y futuro que finalmente tuvo.
Y en 1929, cuando se registró el crack bursátil en Wall Street que detonó la Gran Depresión, Ruben Rausing se unió a uno de sus mejores amigos, Eric Akerlund, para fundar en Suecia la primera fábrica del Norte de Europa especializada en envases.
La llamaron Akerlund & Rausing y la compañía se convirtió pronto en líder de todo el Viejo Continente.
El primer proyecto: bolsas para guardar harina a partir de un sistema que permitía revolucionar la transportación de este insumo básico que entonces sólo se vendía a granel y se contaminaba con frecuencia.
El siguiente gran hallazgo de Ruben Rausing fueron los empaques para leche.
Esto es, la distribución en botellas de vidrio complicaba la venta en los supermercados (ruptura de botellas, esterilización) y había que devolverlas, etcétera, así que en los 40´s creó plásticos termo-sellables que algunos años después terminaron por convertirse en los envases de cartón para leche que conocen prácticamente todos los países del mundo.
Hacia 1951, los dos socios ya habían establecido una filial de su empresa matriz al norte de Suecia, a la que llamaron Tetra Pak, y cuyo objeto original era vender tetraedros de cartón.
En 1965, luego de largas charlas, Rausing vendió su participación en la empresa Aikerlund & Rausing, y compró todas las acciones correspondientes a Tetra Pak, en la que decidió especializarse.
Su meta era concentrarse en la fabricación de envases para la distribución de líquidos. Y así lo hizo hasta 1991, año en el que su empresa inició una nueva etapa.
Tetra Pak adquirió Alfa Laval, uno de las compañías líderes en la venta de equipo para la industria alimentaria.
En 1992, la empresa sufrió una reorganización completa y en 1993, se formó el grupo Tetra Laval, que hoy comprende Tetra Pak y De Laval.
Las cuentas del consorcio familiar caminaban bien, así que Birgit poco tenía que preocuparse sobre el asunto... hasta el año 2000. Gad, su marido, muere en enero, apenas cruzado el umbral del nuevo milenio, y Birgit y sus tres hijos heredan una fortuna que rondaba los 9.000 millones de francos suizos.
Birgit se mudó definitivamente a vivir al cantón de Vaud, en Suiza. Primero, por el gusto que tiene por los lagos y los paisajes serenos. Segundo, por un argumento esgrimido por sus hijos con carácter irrefutable: los beneficios impositivos que obtendrían radicando en Suiza.
Así, sus tres hijos tomaron las riendas del consorcio, Björn es el jefe de fusiones y adquisiciones de Tetra Laval.
Kristen, la mayor, soltera, pasa sus días entre Gran Bretaña y Suiza, es una apasionada de la equitación, disciplina que practica desde niña; y toma parte de las decisiones financieras del grupo. Y Finn también supervisa los negocios familiares al tiempo que funge como presidente del Instituto de Economía Aplicada de Suecia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario